Cómo ser monitor de campamento: debes divertir e imponer

Para ser un buen monitor de campamento es importante saber en todo momento quién se es y dónde se está. Porque no es fácil adivinar cuándo podemos pasar esa línea roja que hace que nos comportemos como amigos de los chicos y chicas; y cuando hay que mantenerse firme y dejar claro que, antes que colegas, somos monitor y “alumno” (por decirlo de alguna manera).

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Ejercer de monitor de campamento puede ser una labor extremadamente divertida, sin embargo, conlleva una serie de obligaciones. Tendremos a nuestro cargo a un buen número de jóvenes que, en muchos casos, no nos lo van a poner nada fácil. Es bueno que caigamos bien, que se rían con nosotros, pero siempre deben saber que estamos un peldaño por encima.

Consejos para ser un buen monitor de campamento

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Los consejos que os puedo dar para ser buenos como monitores de campamento se podrían establecer en base a dos objetivos: por un lado que los chavales se porten bien y que no suceda ninguna desgracia; por el otro hacer que se diviertan, que vuelvan a casa pensando en que llegue el siguiente verano.

Dentro de las sugerencias para el primero de los propósitos estarían las siguientes:

1. Conocer al grupo: en todos los grupos habrá chicos o chicas que se porten mejor y peor. Más gamberros y menos. Extrovertidos, introvertidos. Tímidos y egocéntricos. Lo mejor es que conozcamos a cada uno. Si hacemos una actividad en la que hay riesgo de que el “gamberro” saque a pasear su fama, lo vigilaremos más. No pasa nada. No es peor que los demás por eso. Son niños.
2. Planificación: para evitar riesgos e improvisaciones, lo más importante es haber planificado con anterioridad las actividades a realizar.
3. Responsabilidad: es obvio. Si queremos que se porten bien tendremos que dar ejemplo. Es peligroso subirse a un árbol, pues no sería muy producente que nos pusiéramos nosotros a trepar.

Hemos logrado que no haya heridas, ni pérdidas, ni peleas. ¿Conseguiremos ahora como monitores de campamento que los chavales se lo pasen bien?

1. Una sonrisa y a disfrutar: será complicado que los chicos y chicas lo pasen bien si su monitor tiene cara de aburrido y enfadado. De eso nada. ¡A sonreír!
2. Hacer lo que les gusta: se pueden planificar actividades que no sean muy del agrado de los chicos: inglés, caminatas de varios días. Está bien, pero habrá que compensarlo con lo que les divierte: fútbol, fiestas, concursos.

Ser monitor de campamento es una actividad que, si se hace bien y con responsabilidad, es altamente reconfortante. Yo lo he sido en varias ocasiones y recuerdo todas con especial cariño.