Los campamentos son una experiencia vital única. De repente, el niño o el joven se encuentra solo ante el peligro sin la protección de su familia y empieza a conocer otro tipo de relaciones sociales más intensas. Es un ensayo de lo que es la vida y como todo ensayo tiene sus momentos buenos y aquellos que no lo son tanto, ¿verdad? Sin duda, jamás olvidarás los buenos ratos pasados en compañía de otros y las experiencias únicas que viviste en tus campamentos.
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No obstante, los ratos inolvidables van de la mano de aquellos instantes que compartiste con esas personas un tanto irritantes, que seguro conociste alguna… Lo que no sabías entonces es que se trataba de un aprendizaje para tu futuro. Antes de que se inventara “Gran Hermano” ya existían los campamentos. Enfrentarse a todo tipo de gente es un gran paso para conocerse a uno mismo y aprender a relacionarse. Eso sí, a veces hay que sufrir.
El compañerismo tiene un precio muy alto
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Analicemos a esas personas con las que desearías no haberte topado en un campamento. Un clásico: el gorrón. Ese sujeto que se come todo lo que te mandaron tus padres en ese paquete tan deseado. Con o sin permiso, un gorrón no pregunta, ataca. Otro típico personaje del campamento es el líder. Dícese de aquel que espera ser obedecido y que habla dando órdenes. Se trata de un ejemplar que sobresale en belleza o autoridad y que destaca por hablar más alto que los demás empleando siempre un tono de superioridad. Debes saber que un líder no se hace, nace como tal. Nunca lo olvides.
En los campamentos también se forjan los escapistas o también conocido como “jetas”. Esos individuos que fingen que hacen algo cuando en realidad no hacen nada. Siempre en movimiento, eso sí, pero cuando hay que trabajar son los últimos en aparecer. En esta categoría también se mueve el escurrebultos. Normalmente se trata de un instigador que anima a incumplir las leyes de la comuna. Sin embargo, a la hora de asumir responsabilidades o culpabilidades, nadie sabe dónde está y, lo que es peor, es un maestro en incriminar a “cabezas de turco”.
Tal vez topaste con algunos de estos “compañeros” durante tu campamento, o con alguien a quien le encantaba hacerte pesadas bromas y reírse de todo. Cuéntame, ¿qué personas conociste en tu campamento que quizá no te hubiera gustado conocer? ¿Alguien se dedicó a hacerte la vida imposible esos días? ¡Solo espero que no lo consiguiera! Y lo mejor de todo ¿qué aprendiste?
Hola, muy buenas tardes.
Soy Mark Moran de Irlanda y vivo en Andalucia hace 4 años, he visto su anunico por los campamentos de verano y mi gustaria mucho si puede ver mi CV. Estoy buscando empleo durante el verano y su camps parece genial.
Gracias,
¡Hola Mark! Yo no ofrezco trabajo en campamentos, simplemente me gusta hablar sobre ellos, contar las diferentes opciones, dar ideas y consejos a los papis… ¡Suerte en tu búsqueda!